Paso 1: elige una receta de magdalenas

Las magdalenas son fáciles de preparar, pero existen algunas técnicas que ayudarán a garantizar que cada lote de magdalenas se hornee tierno y delicioso. Elija una receta de magdalenas que desee probar y siga los pasos a continuación.
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Paso 2: prepara el molde para muffins

Engrase los moldes para muffins cepillando los fondos y los lados con manteca o manteca suavizada, o rociándolos con spray antiadherente. O use fundas de papel, que no requieren engrase.
Paso 3: mezcla los ingredientes

Mezcle todos los ingredientes secos en un tazón. Use una cuchara de madera para hacer un agujero o pozo en el centro.
Paso 4: combine los ingredientes húmedos y secos rápidamente

Mezcle los ingredientes húmedos en un recipiente aparte, luego vierta la mezcla (de una vez) en el pozo.
Consejo: El pozo garantiza que los ingredientes se combinen rápidamente para que no mezcle demasiado la masa.
Paso 5: tenga cuidado de no mezclar demasiado la masa

Use una cuchara de madera para mezclar los ingredientes húmedos y secos hasta que se combinen. La masa se verá grumosa con pequeños trozos de harina.
Consejo: Mezclar demasiado la masa puede causar picos, túneles y una textura dura.
Consejo: la masa para muffins no debe prepararse con anticipación (a menos que lo especifique la receta). Las masas que usan polvo de hornear y bicarbonato de sodio deben hornearse de inmediato para que no se pierda su poder leudante (lo que hace que los productos horneados sean livianos y tiernos).
Paso 6: llena los moldes para muffins

Coloca la masa de muffins en las tazas de muffins preparadas con dos cucharas. Llene los vasos de 2/3 a 3/4 completos, según las instrucciones de la receta.
Consejo: Si las tazas se llenan demasiado, las partes superiores del panecillo serán planas en lugar de abovedadas.
Paso 7: agregue ingredientes (si lo desea)

Después de llenar los moldes para muffins, espolvorea los ingredientes, como el streusel, sobre la masa.
Consejo: Espolvorea la cobertura uniformemente para que quede encima en lugar de hundirse en el panecillo.